La boutade del autodenominado detective Hank Dolworth es interesante. Si somos seres tecnológicos, habrá que hablar (de hecho ya se hace) de los "derechos humanos" de las máquinas y, de paso, reformular el imperativo categórico kantiano: tomar las tecnologías como fines, y no sólo como medios.
Tal vez deberíamos llamarlos Derechos Ciborgs (apoyándome en Broncano).
ResponderEliminarBuen apoyo el de Fernando y una denominación interesante, pero yo me refiero a las máquinas mismas.
ResponderEliminarsaludos
Interesante el planteamiento, José Luis,...porque, ¿hay algo que podamos hacer nosotros que no puedan las máquinas?, ¿y hay algo que puedan las máquinas que nosotros no podamos? Blade Runner creo que está detrás de todo esto...
ResponderEliminar¿y cuál es esta película?
Gracias de nuevo
Hola David, buenas preguntas. Al ver este episodio de la serie "Terriers" estaba trabajando sobre la "Internet de las cosas", la famosa 0.Si cada cosa va tener su identidad, si toma la iniciativa de las conexiones, entonces, la pregunta va más allá de la que se planteaba la ciborg Kusanagi en "Ghost in the Shell" ¿Para qué un ser humano?. Redefinir la humanidad implica también sus derechos
ResponderEliminar¿No te parece?
Abrazos
Pero, tal vez, antes de pensar en un derecho para las máquinas habría que pensar en uno para los ciborgs.
ResponderEliminarCuando leí "Blade Runner. El Derecho, guardián de la diferencia" y "Star Trek y los Derechos Humanos" me pareció que ambos iban en ese sentido.
El derecho de las máquinas tendría que ser inventado por otras máquinas (Espero. Porque con lo malos que somos haciendo nuestras leyes, no me quiero ni imaginar lo que a las pobres máquinas se les vendría encima)
Saludos